En el restaurante albigeois «Saveurs Gourmandes», se han descubierto empleados clandestinos viviendo en condiciones inhumanas, en una verdadera pocilga. Esta situación escandalosa plantea la pregunta crucial: ¿es inminente el cierre del restaurante? Profundicemos sin más en el corazón de este escándalo que revela los oscuros entresijos del mundo de la restauración.
Condiciones de vida inaceptables para los empleados

El restaurante albigeois «Saveurs gourmandes» está en el punto de mira después de ser señalado por prácticas escandalosas. Una investigación llevada a cabo por la inspección del trabajo reveló que seis empleados, varios de ellos en situación irregular, vivían en condiciones insalubres y peligrosas. Estos trabajadores estaban alojados sobre el restaurante, en lo que ha sido descrito como una verdadera pocilga.
Revelaciones impactantes
El 29 de abril, los inspectores descubrieron habitaciones ocultas y una atmósfera nauseabunda, con botellas de orina esparcidas por el suelo. Los testimonios de algunos empleados indican que el gerente era consciente de la precaria situación de su personal. Sin embargo, este último niega estas acusaciones, a pesar de las abrumadoras pruebas recopiladas por la inspección.
La reacción de las autoridades
Michel Vilbois, el Prefecto del Tarn, insinuó que un cierre administrativo del establecimiento era inminente. Durante un encuentro con estudiantes de secundaria de Carmaux, afirmó que su mano no tembló para cerrar el alojamiento colectivo, y que el restaurante seguiría el mismo camino en los próximos días. «Mi mano no tembló para cerrar este alojamiento y es ella también la que cerrará en unos días el restaurante en cuestión», declaró.
Las disculpas y las medidas correctivas del restaurante
Frente al clamor público, el restaurante reaccionó en las redes sociales, presentando sus sinceras disculpas a sus empleados. La dirección subrayó que había tomado medidas inmediatas tan pronto como la inspección del trabajo descubrió los hechos. Los empleados afectados fueron reubicados esa misma noche en condiciones que cumplen con los requisitos regulatorios, una obligación legal que el establecimiento afirma respetar ahora.
Próximos pasos
Tras la inspección, el prefecto ordenó el cierre del alojamiento colectivo. En lo que respecta al posible cierre del restaurante, la información sigue siendo, por ahora, confusa. Contactada, la Prefectura indicó que no tenía «información en esta etapa» sobre nuevas medidas que podrían tomarse.
Puntos clave a recordar
- Seis empleados vivían en condiciones insalubres sobre el restaurante.
- El gerente es acusado de estar al tanto de la situación, aunque niega las acusaciones.
- El prefecto del Tarn considera un cierre administrativo del establecimiento.
- El restaurante ha tomado medidas para reubicar a los empleados afectados en condiciones regulatorias.
Fuente: www.ladepeche.fr