En el corazón del pequeño pueblo de Ouarville, habitado por solo 500 habitantes, se esconde una historia fascinante de audacia y pasión culinaria. ¿Cómo logró esta comunidad lo impensable al abrir su propio restaurante? Descubramos juntos el relato inspirador de una aventura gastronómica que supo reunir a toda una ciudad alrededor de la mesa.
Un proyecto ambicioso para cubrir un déficit de oferta
Jean-Michel Dubief, alcalde de Ouarville, ha constatado una falta de servicios de restauración en su pueblo de 500 habitantes. «Decidimos crear nuestro propio restaurante para cubrir un déficit de oferta en el sector. El más cercano está a 15 km, lo cual no es nada práctico para los trabajadores y los habitantes de la zona», explica.
Situado en la intersección de dos carreteras departamentales muy transitadas, Ouarville necesitaba una solución para mantener su dinamismo local. Así nació el proyecto del restaurante La Table Gourmande.
Un éxito antes incluso de la apertura
Desde su apertura el 18 de marzo, La Table Gourmande ha atraído rápidamente la atención. Antes incluso de su inauguración oficial el 17 de mayo, en presencia del prefecto y de actores locales, el restaurante ya era percibido como un éxito. Gestionado por Monsieur y Madame Hubert, una pareja apasionada que vive a solo 3 km de Ouarville, el restaurante ha aportado tanto oportunidades de empleo como un nuevo lugar de encuentro para los habitantes.
“Monsieur Hubert, cocinero de profesión, estaba buscando una oportunidad para abrir su propio establecimiento. Para su esposa, que también buscaba empleo, era una ocasión demasiado buena para no aprovecharla”, precisa el alcalde.
Una inversión estratégica para la comuna
La creación de La Table Gourmande implicó una inversión importante para Ouarville. Se gastaron aproximadamente 900.000 € en la construcción del edificio y su equipamiento, y 500.000 € adicionales para habilitar un amplio aparcamiento capaz de recibir vehículos pesados. En total, el proyecto costó cerca de 1,3 millones de euros sin impuestos.
Gracias a las subvenciones y a la recuperación del IVA, quedaban aproximadamente 900.000 € por financiar mediante préstamo y autofinanciamiento. «Finalmente, el gasto neto para la comuna es de solo unos 300.000 euros», se alegra Jean-Michel Dubief.
Un restaurante que dinamiza la vida local
La Table Gourmande funciona todos los mediodías y noches de lunes a sábado y atrae a una cincuentena de clientes diarios. La clientela es variada:
- Trabajadores de empresas locales
- Personas de paso
- Comerciales
- Obreros en las obras cercanas
La cocina, simple pero de calidad, ofrece una buena relación calidad-precio, lo que contribuye a atraer regularmente a los clientes.
Una comuna proactiva
Ouarville no se detiene ahí para mantener su atractivo. El municipio también es propietario de los locales de varios otros comercios esenciales como la panadería, la oficina de tabacos, la agencia de correos, y pronto una tienda de comestibles. Todos estos comercios son apoyados por la comuna, que les proporciona locales listos para usar, reduciendo así el impacto de las inversiones.
Un futuro prometedor para Ouarville
“Este restaurante contribuye a animar nuestro pueblo. Ouarville siempre ha sido una comuna activa y continuaremos invirtiendo para no dejar que nuestro pueblo muera”, insiste el alcalde. Gracias a estas iniciativas, Ouarville espera no solo ofrecer servicios de calidad a sus habitantes, sino también atraer a nuevas familias y trabajadores.
Fuente: www.leparisien.fr