Ingredientes
Receta para 4 personas.
🥬 1 kg de acelgas | 🧂 1 cucharadita de fécula |
🥛 500 ml de leche | 🎹 50 g de mantequilla |
🌾 50 g de harina | 🥚 1 yema de huevo |
🧀 25 g de queso comté rallado | 🌿 1/2 cucharadita de nuez moscada rallada |
🧂 Pimienta | 💧 1 cucharada de aceite de oliva (para el plato) |
Utensilios
🍽️ Fuente para gratin | 🔪 Cuchillo de cocina |
🍳 Olla | 🥄 Cuchara de madera |
🔥 Horno | 🥣 Pote |
🔄 Ramekin o pequeño plato | 🌿 Colador |
⚱️ Batidor | 📏 Vaso medidor |
Preparación paso a paso
Tiempo total de cocción: 40 minutos
Tiempo de preparación: 10 minutos
Tiempo de reposo: 0 minutos
Tiempo de cocción: 30 minutos
PASO 1: Comienza lavando las acelgas. Separa las costillas y las hojas, guardando ambas para la receta.
PASO 2: Cocina las acelgas en una olla grande con agua con sal durante aproximadamente 20 minutos. Luego, escurre bien las verduras.
PASO 3: Mientras las acelgas se cocinan, prepara la salsa bechamel. Derrite la mantequilla, agrega la harina y mezcla bien.
PASO 4: Incorpora gradualmente la leche a la preparación, mientras remueves para evitar grumos. Agrega una nuez moscada al gusto.
PASO 5: Precalienta el horno a 210°C (termostato 7) mientras la bechamel espesa. Sazona con pimienta.
PASO 6: En una fuente para gratin engrasada, coloca una capa de acelgas, luego vierte la bechamel por encima. Repite la operación.
PASO 7: Por último, agrega un poco de queso comté rallado por encima para una corteza dorada y sabrosa.
PASO 8: Hornea el gratin durante aproximadamente 30 minutos, hasta que esté bien dorado y burbujeante.
Realizar un gratin de acelgas en casa representa una forma sencilla y sabrosa de disfrutar de este vegetal rico en nutrientes. Al poner de relieve las costillas de acelgas y el verde, esta receta ofrece una hermosa armonía de texturas y sabores. La preparación de la salsa bechamel proporciona una cremosidad reconfortante que acompaña perfectamente a las acelgas cocidas al vapor.
Con algunos ingredientes básicos como mantequilla, harina y leche, tu plato cobrará vida en un abrir y cerrar de ojos. Al agregar un toque de queso para la corteza dorada, cada bocado será una fiesta de sabores. No dudes en enriquecer esta receta con especias o hierbas para darle tu toque personal.